El packaging de telgopor es una de las industrias más contaminantes en el mercado mundial. En busca de una solución sustentable, un proyecto de la Universidad Nacional del Litoral propone el diseño y elaboración de un biomaterial de empaque obtenido a partir de restos agrícolas y madereros.
¿Cuántos envases plásticos desechas por semana? Los plásticos de un solo uso están presentes cotidianamente en nuestras vidas, su uso es efímero. No obstante, su descomposición puede durar mucho más de lo que podemos dimensionar, ya que en varios casos supera el tiempo de nuestra propia existencia. Se estima que las bolsas demoran alrededor de 55 años en descomponerse, las botellas de agua cinco siglos, los potes de yogur 400 años, los sorbetes descartables entre 150 a 400 años y una bandeja de poliestireno tarda aproximadamente 500 años.
De esta forma, la industria del packaging es actualmente considerada un problema ambiental por los índices de contaminación que genera. En este rubro se diseñan y eligen los materiales que envuelven o envasan los productos a fin de ser seguros, rentables y atractivos para el cliente. Sin embargo, también es necesario que los envases sean lo menos contraproducentes para el medioambiente. Uno de los materiales más utilizados es el poliestireno expandido (EPS), popularmente conocido como telgopor en Argentina. Aproximadamente el 40% de la producción de EPS del mundo está destinado al sector del packaging, como plástico de un solo uso. Este material es frecuentemente utilizado durante un lapso de tiempo menor a un año. Pero una vez descartado puede tardar siglos en descomponerse dejando huellas irreparables en el ambiente.
El reciclaje de EPS es factible, sin embargo el 91% de los restos de este material no son reciclados hoy en día, y terminan en cursos de agua o arrojados en basurales. Frente a esta problemática, un emprendimiento innovador de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) ideó una alternativa sustentable. El proyecto denominado GrowMat propone el desarrollo de un biomaterial que pueda ser utilizado como reemplazo de plásticos de un solo uso.
Packaging sostenible
De acuerdo al equipo de GrowMat, en la última década se ha observado una tendencia mundial hacia el desarrollo sostenible. Del mismo modo, la protección del medio ambiente dejó de ser solo un tema de estado, convirtiéndose en parte de la ética personal en la sociedad actual. A partir de esta situación, cada vez más empresas están buscando implementar estrategias sustentables, ya sea comercializando productos sustentables como adoptando nuevas prácticas de triple impacto en su cadena de valor, como puede ser en las tareas de empaque y presentación de sus productos. En este sentido, GrowMat surgió como una idea de “crear un producto sostenible con el fin de convertirlo en nuestro objetivo de mercado y satisfacer la demanda”.
El emprendimiento tiene el propósito de desarrollar materiales biodegradables y compostables destinados a la industria del packaging, los cuales son producidos a partir de desechos agrícolas y madereros aglomerados por raíces de hongos llamadas micelio. Como materia prima de este producto se emplea el rastrojo de maíz, que se recoge del suelo luego de la cosecha, y restos de poda de vid. El material obtenido tiene características similares al EPS, es rígido, liviano, resistente al agua y a los golpes, protegiendo al producto, y es 100% biodegradable y compostable. Una vez utilizado se puede romper y ser descartado en la tierra en forma de compost, ya que el material se degrada en aproximadamente 180 días.
De esta forma, GrowMat promociona la economía circular, ya que aprovecha residuos y los convierte en nuevos insumos. Los emprendedores explican que aún se encuentran en una etapa de planificación, “el producto todavía no se encuentra en el mercado ya que actualmente formamos parte del programa UNL Potencia, donde se está trabajando en generar un plan de negocios y definir cuestiones claves en la organización del emprendimiento”.
Sobre el proyecto
El emprendimiento está formado por un equipo multidisciplinario compuesto por: Paula Sacripanti Olalla, Ingeniera Química, se encuentra a cargo del área de Laboratorio y Producción; Andrés G. Milos Sucksdorf, Arquitecto y docente en la UNL, quien se encarga del área de Diseño; y Sebastián Sacripanti Olalla, Ingeniero Agrónomo, a cargo del área de Materia Prima.
GrowMat forma parte del Ecosistema Emprendedor de la UNL. Además, ganó el ProyectáBio 2020, un concurso que buscaba promover la capacidad emprendedora de estudiantes y graduados recientes de la UNL. Su objetivo era impulsar la creación de ideas con impacto productivo, que fomenten el desarrollo de la economía circular, el agregado de valor para la bioeconomía, la sostenibilidad y sustentabilidad.