El proceso de suburbanización se caracteriza por extensas franjas periurbanas, de expansión imprecisa, donde el límite entre campo y ciudad se diluye. El crecimiento sin planificación acentúa las brechas sociales, la exclusión y la segregación, genera desequilibrios en el acceso a la tierra, a la vivienda y a servicios básicos.
El crecimiento urbano desordenado deja al descubierto las profundas desigualdades socioeconómicas. Una investigación analizó la situación de Gualeguaychú, Concepción del Uruguay y Concordia. En las tres ciudades se encuentra un espacio público saturado y dificultad para la integración social.
Argentina tiene un índice de urbanización del 89%. El 50% de la población del país reside en seis grandes ciudades o aglomerados. Mientras que el 32% de la población habita en ciudades intermedias (de 10 mil a 500 mil habitantes). La organización de las ciudades suele ser centralizada, es decir, se encuentra una desigualdad social, económica y espacial entre el centro y sus periferias.
Durante las últimas décadas, las ciudades intermedias están en constante mutación, sus periferias experimentan un proceso de expansión y de transformación. Este crecimiento no planificado de las urbes evidencia una serie de problemas, tales como el acceso a la vivienda digna, la falta de infraestructura, la deficiencia de espacios verdes de calidad, entre otros.
Al respecto, la tesis doctoral de Verónica Sersewitz, arquitecta y docente de la Universidad de Concepción del Uruguay, indaga en esta problemática y analiza el caso de Concordia, Gualeguaychú y Concepción del Uruguay. Las tres urbes presentan una problemática en común: la expansión desordenada hacia la periferia. Esto genera una urbanización dispersa, fragmentada y segregada, en condiciones de vulnerabilidad urbana y con territorios degradados.
Crecimiento sobre el Río Uruguay
El 85% de la población de Entre Ríos se localiza a la ribera del río Uruguay. El río corre en sentido Norte-Sur y dota de valiosos recursos naturales a las ciudades. También, posee una eficiente conectividad, ya que el territorio se enlaza a través de la ruta Nacional 14.
Concordia, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú se ubican en el oeste de la región sobre el río Uruguay. Las tres ciudades son de las más pobladas de la provincia junto con Paraná. De acuerdo a lo investigado, al indagar sobre el proceso de crecimiento “pueden observarse desequilibrios, en cuanto a los niveles de desarrollo, donde se manifiestan gran parte de los problemas sociales contemporáneos, y se presentan los principales desafíos para las políticas territoriales”.
En los tres casos estudiados se puede identificar que persiste una centralidad en torno a la plaza principal o fundacional, donde se ubican las principales instituciones religiosas, educativas y administrativas. También, se concentran distintas actividades comerciales, gastronómicas, servicios varios, etc. En simultáneo, existe una amplia periferia que se expande caóticamente. Allí conviven asentamientos informales, viviendas de gestión pública, loteos privados y barrios cerrados. Se carece de centralidades simbólicas y funcionales, “lo que significa una escasa integración urbana y una acentuada fragmentación socio espacial”.
Desorganización territorial
A través del análisis de imágenes satelitales, se puede afirmar que, entre los años 2001 y 2019, se evidencia una gran expansión: Concordia incrementó su superficie un 200%, Concepción del Uruguay un 180% y Gualeguaychú un 130%. Además, el consumo de suelo urbano por habitante se incrementó un 50% en dicho período.
El proceso de suburbanización se caracteriza por extensas franjas periurbanas, de expansión imprecisa, donde el límite entre campo y ciudad se diluye. El crecimiento sin planificación acentúa las brechas sociales, la exclusión y la segregación, así como genera desequilibrios en el acceso a la tierra, a la vivienda y a servicios básicos. Además, produce problemas de movilidad, y consumo de recursos, como el agua y el suelo.
En las tres ciudades estudiadas, se encuentra un espacio público saturado, con gran dificultad para la integración social. Es por ello que resulta necesario “fortalecer a través del diseño urbanístico el desarrollo de la vida pública, la interacción de la población y crear un sistema social propio, dando como resultado patrones de conducta que respondan a la cultura y la sociedad de cada ciudad”, se afirma en el trabajo.
Continuar con el crecimiento desordenado de las ciudades intermedias sólo seguirá generando segregación y fragmentación ciudadana. Es importante reforzar el diseño y la planificación urbana para garantizar una expansión más sostenible, la cohesión social y la preservación de áreas ambientales y del patrimonio histórico y cultural. En síntesis, es fundamental “crear ciudad y no una urbanización dispersa; ordenar la acelerada y desordenada expansión, así como una densificación adecuada, recuperando la idea de ciudad”, señala la especialista.
Sobre la investigación
El desafío urbano de la integración social. Ciudades intermedias de Entre Ríos, Argentinaes una tesis del doctorado en Arquitectura y Urbanismo realizada por Verónica Sersewitz. La docente e investigadora de la Universidad de Concepción del Uruguay es arquitecta especializada en Gestión Urbana Municipal y Comunal. A través de un abordaje analítico de documentos escritos y gráficos, como mapas de urbanización, imágenes satelitales, planos catastrales y censos, se indaga sobre las características físicas y los procesos de transformación de las periferias urbanas en tres ciudades entrerrianas. Los resultados evidencian la necesidad de repensar el modelo de ciudad que se desea, con un ordenamiento territorial más equitativo y equilibrado.