Control biológico en la producción alimentaria

El Laboratorio de Bioquímica de la Facultad de Ciencias de la Alimentación Universidad Nacional de Entre Ríos cuenta con un equipo de investigación conformado por Flavia Vanina Ferreira, técnica profesional de CONICET, y el Dr. Matías Musumeci, investigador de CONICET. Ambos trabajan en una línea de investigación centrada en la «Producción sustentable de alimentos mediante control biológico».

Este equipo se dedica al desarrollo de soluciones sostenibles para la producción de alimentos regionales, empleando el control biológico como una alternativa al uso de fungicidas para prevenir enfermedades ocasionadas por hongos en cultivos locales.

Actualmente, desarrollan dos proyectos de investigación: el Proyecto PICT «Relevamiento del moho verde resistente a fungicidas sintéticos en cítricos poscosecha y tratamiento con alternativas basadas en biocontrol», y el Proyecto PID-UNER «Desarrollo de un fungicida natural para el control del moho gris en arándanos poscosecha».

Para llevar a cabo estos proyectos, los investigadores emplean microorganismos benéficos para las plantas, como bacterias y hongos, los cuales no presentan riesgos para la salud humana ni para el medio ambiente. Estos microorganismos han sido aislados de la flora natural de naranjas y arándanos y actúan como enemigos naturales de hongos que ocasionan podredumbres de frutos. Por ello se pueden aplicar en frutas con el objetivo de prevenir la acción de patógenos como Penicillium digitatum (causante del moho verde en cítricos) y Botrytis cinerea (responsable del moho gris en arándanos). Esta estrategia presenta distintas ventajas ya que no deposita residuos químicos en la superficie de frutas que pueden ser perjudiciales para la salud, no produce contaminación ambiental, no genera resistencia y es compatible con el mercado orgánico.

El Proyecto PICT, financiado por la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), investiga la resistencia del Penicillium digitatum a fungicidas en cítricos poscosecha. El objetivo es generar conocimiento para desarrollar tecnologías alternativas y/o complementarias al uso de fungicidas sintéticos, mediante el biocontrol con microorganismos regionales y la aplicación de compuestos naturales encapsulados en nanoestructuras funcionales.

Por su parte, el Proyecto PID, financiado por la UNER, se enfoca en el desarrollo de una fumigación con compuestos volátiles producidos por Trichoderma para inhibir las pudriciones causadas por Botrytis cinerea en arándanos.

Hasta la fecha, los resultados han sido alentadores. Se ha logrado reducir hasta un 90% la pudrición en naranjas con la aplicación de cepas de Trichoderma y Bacillus, alcanzando una eficiencia comparable a la de un fungicida químico.

En el caso de los arándanos, donde no existen fungicidas registrados para aplicaciones en poscosecha, se ha descubierto que una cepa de Trichoderma genera un compuesto volátil capaz de inhibir Botrytis. Este compuesto además resulta compatible con la industria de alimentos. Por lo tanto, esta estrategia sería válida para aplicaciones en poscosecha.

Los resultados obtenidos se han publicado en revistas científicas de prestigio, como Food Microbiology, Journal of Applied Microbiology, Biological Control, World Journal of Microbiology & Biotechnology y Applied Biochemistry and Biotechnology. Además, los microorganismos aislados están disponibles para convenios con empresas productoras de estos insumos.

Desafíos y Colaboraciones

La investigación del laboratorio ha enfrentado distintos desafíos, como la identificación de microorganismos efectivos. De los 50-60 aislamientos de Trichoderma realizados en placas de petri, solo 10 funcionaron adecuadamente, y en pruebas en fruto, solo uno resultó efectivo. Si bien los avances alcanzados son prometedores aún restan varios desafíos por resolver, como una correcta adsorción en superficies de frutos y adaptabilidad a líneas de empaque. 

Además, los investigadores colaboran activamente con el INTA Estación Experimental Concordia y con empresas del sector agrícola. Participan en congresos científicos, destacándose la participación del Dr. Musumeci como expositor invitado en el último congreso de citricultura, donde presentó resultados tanto sobre Trichoderma como sobre bacterias del género Bacillus.

De esta forma, el equipo busca contribuir a una producción de alimentos sostenible y libre de químicos potencialmente nocivos. «Ese es nuestro gran objetivo, y creemos que el control biológico es una herramienta idónea», señalaron. Plantearon además un interrogante clave del laboratorio: «¿Qué capacidades presentan los microorganismos de la región de Entre Ríos para contribuir a una producción de alimentos sustentable?» Concluyeron subrayando la importancia de esta investigación en la búsqueda de soluciones sostenibles para la producción de alimentos regionales.

Fuente: Facultad de Ciencias de la Alimentación – UNER

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