¿Cómo se aplica la geotecnología en el sector Agro?

Por Redacción IDL

Las geotecnologías se afianzan como herramientas clave para el monitoreo ambiental y la gestión sostenible en el agro. El investigador Néstor Di Leo analizó su impacto en los agroecosistemas y los desafíos de su implementación.

El avance de la tecnología ha abierto nuevas posibilidades para la gestión y preservación del ambiente en el sector agropecuario. En este contexto, las geotecnologías se han convertido en herramientas fundamentales para el monitoreo y la mitigación del impacto ambiental, permitiendo un análisis más preciso y en tiempo real de los cambios en los ecosistemas. Desde la teledetección hasta los sistemas de información geográfica (SIG), estas tecnologías ofrecen soluciones innovadoras para la planificación territorial, la conservación de recursos naturales y la prevención de desastres ambientales.

En la Universidad Nacional de Rosario, diversos grupos de investigación trabajan en el desarrollo y aplicación de estas herramientas para abordar problemáticas locales y globales. El investigador Néstor Di Leo del Centro de Estudios Territoriales de la Facultad de Ciencias Agrarias, explicó cómo las geotecnologías están transformando la manera en que se estudia y protege el ambiente, los desafíos que enfrenta su implementación y las perspectivas a futuro en este campo.

“Las geotecnologías son herramientas que se basan en utilizar la ubicación sobre la superficie de la tierra, por eso el prefijo geo, de cualquier situación, condición, estado, evento de interés o proceso que ocurra en cualquier lugar. Obviamente estas están enfocadas hacia las interacciones entre suelo, plantas y atmósfera, tanto en el contexto de ecosistemas naturales como de agroecosistemas, que de alguna manera debido a la antropización creciente es ampliamente prevaleciente”, explicó Di Leo y agregó: “Si se observa el planeta desde arriba quedan muy pocos lugares en donde no se vea realmente la incidencia del ser humano, por esto operativamente preferimos hablar de agroecosistemas y no de ecosistemas, a secas”. 

En este sentido, el especialista especificó que las geotecnologías se pueden dividir en tres grandes tipos principales. El primero son los sistemas globales de navegación por satélite, conocidos como GNSS o GPS. “El más conocido de estos sistemas es el GPS estadounidense, pero no sería correcto hablar únicamente de este, ya que la denominación apropiada es Global Navigation Satellite System (GNSS), porque este concepto incluye a otros sistemas de posicionamiento globaels. Esa tecnología permite ubicar o georreferenciar cualquier cosa, y lo utilizan infinitas aplicaciones, desde sistemas de vigilancia especializados hasta apps populares que tenemos en nuestro celular”.

El segundo tipo se vincula con los Sistemas de Información Geográfica, conocidos como GIS, por su acrónimo en inglés (Geographic Information System). “Estas son estructuras organizacionales soportadas por software específico, capaces de analizar capas de información de manera muy eficiente y eficaz. Permiten encontrar relaciones, situaciones causales y además integrar distintas fuentes de información. Por ejemplo, la granizada o pedrada que hubo hace algunas semanas en varios puntos de la región: uno podría tener un mapa satelital de la tormenta y relacionarlo con las denuncias de siniestros de seguros agropecuarios o automotores”.

Por eso mismo, los GIS permiten la administración de información de cualquier tipo: ambiental, productiva (ya sea agropecuaria, industrial o minera), social, entre otras. Se trata de información georreferenciada que incluye el componente de la ubicación. “La información en sí es valiosa, pero en muchos casos, además resulta clave saber dónde ocurre un determinado suceso, evento o fenómeno. En esos casos, los Sistemas de Información Geográfica resultan altamente eficaces para gestionar, analizar y organizar esos datos de manera precisa”.

Néstor Di Leo, coordinador de la diplomaturas en Sistemas de Información Geográfica y en Drones Aplicados a las Ciencias Agropecuarias y Ambientales

El tercer tipo son los sensores remotos, los cuales se tratan de dispositivos que captan información de un objeto o fenómeno a la distancia. “Hay varios tipos, pero los más difundidos son los sensores remotos digitales basados en cámaras. Estas cámaras pueden ser convencionales, como las fotográficas a color, o más complejas y /o avanzadas como los multiespectrales o hiperespectrales, y pueden ubicarse en plataformas como drones, aviones tripulados o satélites”.

Estas tecnologías permiten incrementar la productividad y a la vez reducir el impacto ambiental de varias actividades humanas, especialmente en el sector agropecuario. Junto con el manejo agronómico “sitio-específico” conforman un conglomerado de herramientas clave para la agricultura moderna. “Por ejemplo, si un suelo es poco fértil y se aplica fertilizante en exceso, el cultivo no lo absorbe por completo y el excedente contamina el ambiente. Lo mismo ocurre con los fitosanitarios. Antes, frente a una plaga, se aplicaban herbicidas o insecticidas de forma uniforme en todo el lote por falta de tecnologías precisas. Hoy, con drones y sensores, es posible detectar con precisión las zonas afectadas y tratar solo ese porcentaje: 40%, 30% o incluso 20% del campo. Esto permite reducir entre un 60% y un 80% el uso de biocidas, sin perder efectividad. Más allá del debate sobre su impacto en la salud, es evidente que, para quien vive junto a un campo, es preferible una aplicación parcial y acotada, y no total”.

Además, estos dispositivos también se aplican en otros ámbitos, como la logística urbana. “Con un sistema de información geográfica, una distribuidora puede optimizar sus recorridos en una ciudad como Rosario, minimizando el consumo de combustible y, al mismo tiempo, reduciendo costos. Este es un ejemplo del doble impacto que ofrecen estas herramientas: beneficios económicos y ambientales a la vez”.

Estas tecnologías permiten reducir el impacto ambiental de varias actividades humanas, especialmente en el sector agropecuario.

Apostando a la formación

La Universidad Nacional de Rosario, a través de su Centro de Estudios Interdisciplinarios, ofrece dos trayectos de formación especializados en esta área, brindando herramientas clave para el análisis y la gestión territorial.

El primero es la Diplomatura de Estudios Avanzados en Sistemas de Información Geográfica (SIG) Orientados a Estudios Interdisciplinarios, diseñada para capacitar a profesionales y estudiantes interesados en problemáticas territoriales desde un enfoque multidisciplinario. El programa se desarrolla de manera virtual, y se basa en el uso del software libre QGIS y otros complementos. Más información.

La segunda propuesta es la Diplomatura de Estudios Avanzados en Drones Aplicados a las Ciencias Agropecuarias y Ambientales, también de dictado completamente virtual que aborda el uso de drones como herramienta innovadora en el monitoreo y la gestión ambiental. Su cursado está comenzando en esta semana. Más información.

“Las diplomaturas que estamos impulsando buscan justamente fortalecer los conocimientos y las capacidades de las y los graduados de nuestra Universidad en estas tecnologías actuales. Por eso es clave capacitarse, especialmente para el desempeño en contextos profesionales. Son herramientas que también pueden servir para la investigación, la ciencia y la tecnología, pero su foco principal es el uso profesional en el medio productivo y ambiental”,  detalló Di Leo.

Periodista: Gonzalo J. García

Fuente: Universidad Nacional de Rosario

Related Posts