Una especialista analizó las principales causas de consulta psicológica en estudiantes universitarios, el impacto de las redes sociales y el peso de la autoexigencia.
La salud mental en los estudiantes universitarios es una temática que está en aumento en los últimos años. La auto-exigencia, el rol de las redes sociales y el rendimiento académico son fuentes de consulta habitual.
Carolina Chemes, psicóloga (MN 2478), afirmó que hay un aumento de la ansiedad en estudiantes universitarios en los últimos años: «El factor estrés en todo lo que tiene que ver con rendir, la preparación y demás, empieza a ser una preocupación para los jóvenes y se les dificulta mucho la regulación frente a esto».
Lo más frecuente en el consultorio
Según Chemes, las problemáticas más frecuentes en la consulta psicológica dentro del ámbito universitario son:
- Falta de motivación.
- Ansiedad.
- Falta de compromiso en los primeros años.
- Problemas para adaptarse en los primeros años.
Cuestiones económicas.
Lo económico es una de las principales fuentes de estrés, detalló la especialista, pero no es la principal. Por otro lado, las redes sociales juegan un papel sumamente importante en esta etapa «porque se le da mucha importancia al reconocimiento social, la aprobación, el gustar al otro, los likes o el follow. Hay mucha presión por esto».
El acceso a la terapia
Una dificultad principal que enfrentan los estudiantes universitarios a la hora de acceder a una consulta psicológica es la económica, porque, según Chemes, en la actualidad la mayoría de los profesionales de la salud mental no trabajan con cobertura de obras sociales: «Trabajamos de manera particular y eso termina siendo algo que dificulta el acceso».
En este sentido, la situación económica y la necesidad de trabajar mientras se estudia influye mucho en el bienestar de los estudiantes universitarios, principalmente en el compromiso, la motivación y el estado anímico a la hora de estudiar, según la especialista.
La visibilización de los problemas de salud mental
«Socialmente se está viendo un cambio grande en este tema. Hubo muchos acontecimientos que lo favorecieron, como por ejemplo la pandemia, donde se empezó a hablar mucho de salud mental. Asimismo, personas importantes a nivel social y cultural, que son referentes para los jóvenes, comenzaron a darle importancia a estos temas», sostuvo la especialista.
«No hay salud sin salud mental», afirmó Chemes y concluyó: «Hay que darle tiempo, cuidarla, ocuparnos si hay algo que nos hace mal o algún daño. Escuchar, reconocer lo que nos pasa y alojar nuestras emociones es fundamental para el bienestar emocional».
Fuente: El Litoral